(Español) Tendencias e-learning 2015… o no
Ya llevamos más de 10 años hablando de e-learning y nuevas metodologías de aprendizaje. 10 años en los que, cada vez que hacemos balance del año y hablamos sobre nuevas tendencias, pensamos que por fin éste será el año del gran cambio; pero año tras año, la gran revolución sigue sin llegar.
Durante estos años, hemos puesto el foco constantemente en la tecnología, dándole la espalda a la pedagogía, nos hemos olvidado de los alumnos. Se han realizado grandes inversiones en plataformas, en tener los cursos online más modernos, pero sin poner el foco en la pedagogía y creando contenidos aburridos, que no motivan a un alumno que ha perdido el protagonismo en su propio proceso de aprendizaje.
Pero parece que algo está cambiando: la sociedad ha cambiado. Hoy en día todos tenemos un smartphone, consumimos contenidos en Internet y estamos 100% conectados. Las redes sociales, los juegos en red y los nuevos terminales han favorecido este fenómeno. Parece que 2015 sí será el año del cambio, algo que ponen de manifiesto algunas de las tendencias en e-learning para este año que acabamos de estrenar.
- Vídeo.- Los vídeos como parte de un curso e-learning o como un recurso independiente. Son un recurso sencillo (fácil de desarrollar y de consumir), y los alumnos están acostumbrados a utilizarlos. Cada vez es una práctica más extendida acceder a YouTube para aprender a hacer tareas cotidianas: meter en su bolsa una tienda de campaña de Decathlon (el video de cómo desmontar el “refugio seconds 0 de Decathlon” debe de ser de los más visitados en YouTube), cómo introducir una tarjeta SIM en mi nuevo smartphone o como hacer una bufanda de punto. ¿Por qué no aprovechar este recurso para mejorar nuestras habilidades o conocimientos técnicos en el ámbito corporativo?
- Social.- Cada vez conocemos menos personas que no tienen perfil en alguna red social (Facebook, Twitter, Linkedin…). Todos estamos familiarizados con compartir contenidos y opinar sobre lo que leemos. Los programas formativos deben reenfocarse e incorporar actividades colaborativas; el alumno de 2015 es mucho más maduro y está acostumbrado a aprender en grupo. Crea comunidades de buenas prácticas, genera el blog del experto en un producto… Aprovecha las cualidades de tus alumnos para que el resto obtengan beneficio.
- Gamificación.- La palabra de moda durante los 2 últimos años, que no es otra cosa que utilizar los recursos del juego para mejorar la experiencia de aprendizaje. Dicen que recordamos el 90% de lo que estudiamos si nosotros mismos hacemos el trabajo (en real o a través de una simulación). No nos compliquemos, para tener un recurso gamificado, no hace falta desarrollar un videojuego. Generemos rankings, asignemos puntos o insignias a cada actividad, y la competitividad entre los alumnos hará el resto.
- Story learning (story telling).- Todos conocemos el poder de una buena historia. Una buena historia puede emocionarte, puede hacerte cambiar comportamientos, puede tocarte la fibra sensible y motivarte para conseguir un objetivo. ¿Por qué no hacerlo en e-learning? Contemos una buena historia, hagamos partícipe al alumno y el aprendizaje está servido.
- M-learning.- Por fin todos estamos conectados, el acceso está garantizado, todos los usuarios consumen contenidos en Internet… ¿Por qué no consumir formación a través de este medio? Una ventaja que tiene esta forma de acceder a los contenidos es que la pantalla de los terminales es más reducida que las de nuestros PCs, por tanto, los contenidos tienen que ajustarse a este espacio, y se generan mini píldoras, a través de las que es bastante sencillo aprender.
- MOOCs corporativos.- Hasta hace pocos años, los MOOCs eran un término casi exclusivo de las grandes universidades. Parece que durante 2014 se han puesto de moda en el ámbito corporativo, y que las grandes compañías quieren tener sus propios MOOCs como parte de sus planes de formación o para atraer talento del mercado laboral. Sólo hay que darse un paseo por Coursera (www.coursera.org) para ver la cantidad y variedad de recursos que hay en la red. La pregunta que todos nos hacemos es: ¿dónde está realmente el negocio? Tendremos que crear servicios de apoyo al alumno, que mejoren su experiencia de aprendizaje.
- ¿El fin del LMS?.- Nos cuesta creerlo. Se habla mucho de LRS (learning record store), que el alumno acceda a consumir contenidos y tenga experiencias de aprendizaje en diferentes plataformas, y que los datos se exploten de forma consolidada en otro entorno.
De este tema se ha hablado largo y tendido. Son muchos los responsables de formación que, año tras año, dicen que dejarán de invertir en LMS, pero año tras año el mercado sigue al alza. Lo que sí ha cambiado es que pocas compañías quieren tener un LMS propietario, no merece la pena desarrollar a medida: la inversión es demasiado elevada y el producto puede quedar obsoleto en poco tiempo.
¿Será por tanto el año del gran cambio?: el alumno en el centro del proceso, utilizando nuevas metodologías de aprendizaje. Desde luego, lo tenemos todo a nuestro favor. Aprovechemos todos estos recursos para tener unos alumnos mejor formados y más satisfechos, que se sientan protagonistas en su proceso de aprendizaje.
Susana Quintas




